
La mujer está detenida y será juzgada por trato cruel hacia un menor, que implica una pena de prisión de 12 a 36 meses. Tras el arresto, la mujer indicó que salió un momento a la bodega, dejó al niño de 8 años en la casa y cuando regresó lo encontró en la cocina con la olla de frijoles vacía, único alimento para él y ella, quien tiene 5 meses de embarazo.
Es el segundo ataque de este tipo en un pueblo del municipio San Felipe ya que en marzo de este año otra mujer hirió a su hijo con un tenedor por comerse una comida sin permiso y también fue denunciada por sus vecinos al escucharse el llanto del niño.
Según estadísticas llevadas por el Centro Comunitario de Aprendizaje de Venezuela (Cecodap), la violencia intrafamiliar, o puertas adentro, contra los niños y adolescentes, va en escalada, ya que en 2015 la organización registró 3.185 casos de denuncia intrafamiliar y en 2016 la cifra ascendió a 9.807, siendo los detonantes el estrés y la crisis que se vive en el país.